Definitivamente hemos dejado el verano atrás. Con el cambio de armarios se impone hacer un listado de los tratamientos faciales de otoño para eliminar los estragos de la estación estival y preparar nuestra piel para el frío, que en las próximas semanas se irá haciendo más intenso.

Seguramente, nuestro rostro ya ha empezado a notar que los termómetros han bajado de manera considerable, especialmente si en nuestra vida diaria nos vemos obligados a pasar tiempo en el exterior. Hay que tener en cuenta que en estas últimas semanas hemos cambiado de vestimenta y hemos empezado a usar prendas más abrigadas que cubren nuestro cuerpo al tiempo que lo protegen de las agresiones externas.

No obstante, la piel de la cara sigue estando expuesta a las bajas temperaturas, a la radiación solar (que sigue siendo dañina a pesar de que el sol no brille con la misma intensidad que en verano) y al viento, que repercute en una mayor deshidratación de la epidermis.

Tratamientos faciales de otoño

El otoño es una época de transición en la que la piel necesita regenerarse después del verano y prepararse para afrontar el invierno.

Después de todas las agresiones que ha sufrido nuestra piel durante la época estival (cloro, salitre, sol, aire…) además de los excesos que se suelen cometer en vacaciones (horarios irregulares, comilonas, consumo de alcohol y tabaco, viajes en avión…) nuestra piel está dañada. Por este motivo, en Belleza y Bienestar by Grupo Pedro Jaén enfocamos casi todos nuestros tratamientos faciales de otoño a la regeneración cutánea.

¿Por dónde empezamos?

El primer paso de cualquier tratamiento facial o corporal en nuestro centro siempre es una buena higiene de la piel. Según el criterio de nuestras profesionales, este paso previo es indispensable para liberar la superficie de la piel de las células muertas y facilitar así la penetración de los principios activos que nuestras especialistas seleccionan específicamente para cada paciente.

Tratamiento facial reestructurante

Primero llevamos a cabo una exfoliación de la piel con productos con alfabetahidroxiacidos que eliminan las células muertas, equilibran el pH de la epidermis, aportan luminosidad y unifican el tono de la piel.

A continuación, aplicamos un activo en polvo mezclado con un suero que, mediante la técnica de masaje de bombeo, aumenta la penetración del producto en nuestra piel logrando un efecto tensor.

Para finalizar extendemos una mascarilla oxigenante, la única que nos permite aproximarnos al contorno de ojos porque no resulta agresiva con la delicada piel de esta zona de la cara. Para potenciar el efecto de esta mascarilla empleamos papel osmótico que evita la evaporación de los principios activos, favoreciendo así su penetración e incrementando su efectividad en menos tiempo.

Tratamiento facial revitalizante

El primer paso de este tratamiento siempre va a ser una mascarilla activadora que, además de estimular la circulación, nos va a servir de guía para saber qué necesidades tiene la piel en ese momento. En el siguiente paso aplicamos una mascarilla enzimática, cuya función es doble: por un lado, limpia eliminando las células muertas de la superficie de la piel y por otro regenera la epidermis.

La mascarilla revitalizante que se aplica a continuación aporta a la piel los nutrientes que necesita dejando su aspecto terso y sedoso. Gracias al masaje manual activador con el que finalizamos el tratamiento, conseguimos potenciar los resultados de la mascarilla logrando un efecto tensor.

No lo retrases

Al respecto de cuándo empezar los tratamientos faciales de otoño, en nuestro centro nos encontramos muy a menudo con pacientes que retrasan su cita con el cuidado de su piel pensando que estos procedimientos acabarán con los vestigios del bronceado que aún pueden quedar del verano.

Sin embargo, el fenómeno es justamente contrario. La exfoliación, la hidratación y la regeneración ayudan a prolongar el bronceado de la piel y a que el tono de la piel bronceada sea uniforme y dorado. Retrasar estas rutinas lo que hará es darle a la piel un aspecto más apagado y manchado.

Estos tratamientos faciales de otoño logran rehidratar y nutrir la piel después del verano, que suele presentar signos propios del fotoenvejecimiento: tono apagado, sequedad, manchas… dándole luminosidad, limpieza y un tono uniforme.

Gracias a estos recursos, además, prepararemos la piel para cuando las temperaturas bajen todavía más y el invierno haga acto de presencia por completo. Además, para completar la puesta a punto otoñal no dejes de consultar nuestros tratamientos corporales de otoño.

No dejes de reservar tu cita en Belleza y Bienestar by Pedro Jaén.